Respecto al línea de las estafas en la videncia, Alicia Collado lo tiene en la mira, atenta a cualquier cosa que pudiera ser condenada por ella, las autoridades y sitios de esoterismo, pues la videncia en los últimos años ganó cierto auge y ahora cualquiera quiere y puede ser vidente embaucando a  personas inocentes acaban en las manos de estos timadores, exponiendo  sus situaciones más comprometedoras y frágiles, tanto así que  son capaces de creerse cualquier cosa que una persona de bajo prestigio le presente y  les convenza que  sus vidas vuelvan a ser como eran antes sin problemas.

Para  detectar  esto, Alicia Collado tuvo una conversación larga con nosotros y nos puntualizó varias situaciones clásicas que se dan en las estafas de videncia, de esta manera podremos evitar cualquier tipo de estafa a largo plazo y ser más precavido a la hora de pagar por estos servicios.

Hay una mano negativa que mueve tu vida y destino

Estos estafadores suelen engañarte  diciéndote que sobre ti hay una tipo de magia negra, la cual está afectando tu vida y relación, haciendo referencia al popular mal de ojo encima. Aunque pueda ser una  valoración surrealista, declarar esto les funciona muchas veces, pues se aprovechan de la inocencia y desconocimiento de aquellos clientes que están empezando en el mundo de la videncia y esoterismo  para meterles desasosiego en el cuerpo, por lo que al decirles eso, en seguida preguntarán cómo pueden deshacerse de ese mal de encima, pues tienen miedo de que esto pueda perjudicarles más de los que lo perjudica en la situación actual donde decidieron llamar a un vidente, es así como relata Alicia Collado que se inician muchas de las estafas en el mundo esotérico.

Como por arte de magia tú vidente no volvió

Una de las situaciones  más comunes de los falsos “videntes” que estafan a sus clientes, es la de irse, desaparecer y cortar toda comunicación tras la última etapa del falso ritual  fase, borrando todo de su existencia de tu vida y el internet, desatendiendo cualquier llamado de atención que se puede hacer.

El lapso que puede pasar desde que inician sus falsos hechizos hasta que desaparecen es poco medible, y todo dependerá enormemente del sistema de fraudes y/o rituales falsos que haya realizado, ya que cuanto más personas hayan sido estafadas  con más urgencia desaparecerá de todos los sitios del mundo y con muchas probabilidades de que la información personal que te dio sea falsa

Por  este modus operandi y estereotipo sabido entre los expertos de la videncia pueden calcular que al pasar unos meses es que toman ese rumbo, un chamán sin experiencia estafador dura fácilmente más de unos 3 meses desde que aparece, cometiendo todos sus delitos y yéndose victorioso, así nos  comenta Alicia Collado.

Esto obviamente es un momento de desesperación y desesperanza , pues la cualquiera que ha acudido a estos videntes, lo más plausible es que haya pagado una gran cifra de dinero, con el afán de arrancar sus problemas, y jamás por su mente se imaginan que puedan dejarlos tirados sin su dinero y con el problema  original, dejando totalmente a esta personas sin ánimos de volver a probar suerte en el mundo de la videncia, muchos de estos casos no proceden a nivel legal puesto que es muy difícil comprobar la identidad o tipo de contrato que hacen esta redes para embaucar a las personas.

Toda promesa queda en el olvido

Esta situación es muy difícil de prevenir, ya que siempre se hace alusión al final de estos milagros rituales, pero es importante saber qué hacer en estos casos. Por bien sabido, estos falsos videntes, siempre tendrán un ritual  que ofrecerte, asimismo en ocasiones te animará a actuar diferentes rituales con ellos para procurar que el resultado sea más efectivo, asegurándote que todo se arreglará más rápido incluso.

 También suele suceder en el momento del hechizo, te ofrecerán muchos rituales a una cantidad de dinero desmedida y acompañada con falsas promesas, si te encuentras en alguna de estas situaciones, Alicia Collado te recomienda huir rápidamente de ese vidente, a menos que quieras perder grandes cantidades de dinero, energías y esperanzas.